Una delicada situación financiera, inversiones inmobiliarias
ruinosas, un concurso de acreedores que supone más de un dolor de cabeza para
los dirigentes y luchar por la permanencia esta temporada. Todo esto es lo que caracteriza a la Penya esta temporada. Detrás
de todo esto existen brotes de esperanza y un servidor lo observó en la Ciutat
Esportiva Joan Gamper. Se enfrentaban el Barça B y el CB Prat en partido de la
LEB Plata. La inocente intención de un servidor era observar las evoluciones de
Joan Creus, Josep Pérez, Marcus Erikson y Mbaye. La sorpresa me vino por parte del equipo visitante, que dominó la
primera parte y que finalmente se llevó por delante un partido en la prórroga.
Destacó un nombre, Marko Todorovic. La esperanza del futuro de la Penya.
Marko Todorovic es un ala pivot montenegrino de 19 años que
ya debutó la temporada pasada con Pepu Hernández. Es un jugador móvil y muy
rápido de movimientos. Esta temporada sigue jugando en el equipo vinculado. Su
partido resultó sobresaliente con 26 puntos, 6 rebotes y 11 faltas recibidas, no
pasó desapercibido para un célebre entrenador presente en la grada visualizando
el partido. Era Aíto Garcia Reneses,
acompañado por Salva Maldonado en la grada del recinto. Conversando con Aíto sobre
qué jugador le gustaba más y veía con más nivel ACB -con la intención de que me
hablara de Josep Pérez- me respondió rápidamente y con bastante seguridad «Todorovic,
y sin ninguna duda». La misma
seguridad de quién se atrevió a hacer debutar a Navarro en el Barça o a un
Ricky Rubio en la Penya con 14 años. Todorovic
tuvo una lesión que le ha mantenido ausente durante tres semanas, por eso suma 5
partidos con una media de 20,6 puntos, 9 rebotes y casi 6 faltas recibidas por
encuentro. Su concurso permitirá al CB Prat participar en la Copa LEB Plata, su
evolución dictaminará si derriba la puerta del primer equipo de Salva
Maldonado.
Es una buena noticia que
pese al derrumbe de la Penya a todos los niveles se mantenga su esencia más
pura. La cantera es el principal balón de oxigeno del club para subsistir.
Evidentemente será complicado que salgan jugadores de la talla de Rudy
Fernández o Ricky Rubio pero sí
jugadores interesantes como en su momento Josep Franch o David Jelinek en la
actualidad. Todorovic por su parte está demostrando, de momento, que la LEB Plata es
insuficiente para su calidad aunque la ACB es una competición demasiado exigente
para un equipo que actualmente tiene que enfocar cada partido como si de una
trinchera se tratara. Entre esta y otras circunstancias ya estaría en el primer equipo.
Su nombre va a sonar en los próximos meses. Pese a su precocidad su nivel es muy
elevado y apunta directamente a equipos de ACB y Euroliga. Acaba contrato esta
temporada y equipos importantes toman nota de su situación. Cada jugador tiene su trayectoria, ni se
busca la precipitación pero tampoco se debe encasillarlo en categorías poco
ajustadas en estos momentos a su nivel. Su rendimiento dictará si se acortan los plazos pero
el jugador necesita jugar en la ACB porque puede ser uno de los últimos valores
muy emergentes que tiene ahora mismo el club. Será cuestión de atrevimiento de quién le de la verdadera alternativa. La Penya tiene en él a una joya
para ilusionar a la afición y el último entrenador que dio la alternativa a
desconocidos que se convirtieron estrellas ha dado su visto bueno.
El contraataque 